
Como la mayor parte de niños en la comunidad de Chibuleo, tuve afición natural por el fútbol. A los 8 años de edad, formé el primer equipo barrial con niños de San Luis de Chibuleo, esta práctica lo hacía a escondidas de mis padres, luego de haber cumplido con las tareas diarias, puesto que, para nuestros mayores, jugar, era una distracción de gente ociosa o desocupada.
A los 13 años, cobijado de sano ánimo deportivo, con los amigos del sector, armé mi propio equipo de fútbol y le llamé Técnico Juvenil San Luis; a los 14 años, ya jugaba en la categoría de mayores, en posición de delantero. En cada partido, añoraba que jóvenes indígenas fueran parte de un equipo profesional, algo que hasta entonces parecía imposible.
Con el transcurrir de los años, me dediqué a estudiar dentro y fuera del país, al tiempo que inicié las gestiones de la creación de la Cooperativa de Ahorro y Crédito ´Mushuc Runa’ (‘Hombre Nuevo’), luego de dilatada gestión, el 17 de diciembre de 1997 es reconocida la Cooperativa indígena como entidad financiera de apoyo a emprendedores de todo el país.
El 2 de enero de 2003, en la parroquia Pilahuín, formé el equipo de fútbol para representar a Mushuc Runa Cooperativa de Ahorro y Crédito en las ligas barriales, de las parroquias rurales de Juan Benigno Vela y Pilahuín, así nació Mushuc Runa S.C., en las barriales.
Más adelante, en 2005, con apoyo de 130 socios fundadores, conformamos el equipo, nos afiliamos a la Asociación de Fútbol Profesional de Tungurahua y empezamos en Tercera Categoría.
Contra todo pronóstico y luego de una intensa campaña, en 2008, ascendimos a la segunda categoría. Pero no sería sino hasta el año 2011, en el tercer intento, que Mushuc Runa S.C. llegó a la Serie B del fútbol profesional ecuatoriano, este logro fue considerado como histórico, puesto que un equipo formado por indígenas, por mérito propio, llegaba al fútbol profesional.